El presidente Donald Trump ha emitido una fuerte advertencia sobre la situación en Medio Oriente, dejando claro que no habrá un cese al fuego si Egipto y Jordania no aceptan recibir millones de palestinos desplazados de Gaza. Durante una reciente reunión con el rey Abdalá II de Jordania en la Casa Blanca, Trump presionó al monarca para que acepte una mayor cantidad de refugiados palestinos, sugiriendo que la seguridad en la región dependerá de la cooperación de estos países árabes.

Sin embargo, el rey Abdalá se mostró reacio a aceptar la propuesta, limitándose a ofrecer la recepción de 2,000 niños palestinos enfermos, lo que desató el descontento de Trump. Según informes, el presidente estadounidense ha instado a Jordania y Egipto, países que dependen del apoyo militar de Estados Unidos, a que actúen con más disposición para albergar a los palestinos que no pueden regresar a Gaza.

En medio de estas tensiones, Trump también ha señalado que la guerra en Gaza podría intensificarse si no se llega a un acuerdo. El presidente incluso amenazó con “desatar el infierno” sobre los grupos militantes palestinos si no liberan a los rehenes israelíes antes del fin de semana.

Por otro lado, en un contexto de mayor presión, Trump ha tenido enfrentamientos con figuras clave, como el Papa Francisco y varios líderes demócratas, mientras su administración avanza en la implementación de políticas de reducción de costos, incluyendo medidas como la revisión de la eficiencia gubernamental bajo la supervisión de Elon Musk.