Esta semana, asesores cercanos al expresidente de EE.UU., Donald Trump, se reunirán con altos funcionarios rusos para abordar la situación en Ucrania, marcando un evento clave en las relaciones internacionales. La reunión, que incluye a figuras destacadas como Marco Rubio, es la primera de este tipo desde el inicio de la invasión rusa a Ucrania en 2022.
El encuentro ha desatado una oleada de críticas en Europa, donde los líderes, especialmente de Ucrania, se sienten traicionados por Trump, quien ha decidido excluir a Europa de las negociaciones en esta fase. En respuesta, el presidente ucraniano, Volodymyr Zelensky, ha propuesto la creación de un ejército europeo independiente para contrarrestar la amenaza rusa, tras la recomendación del jefe de la OTAN, Jens Stoltenberg, de que Europa aumente su gasto en defensa.
La reunión también provoca un fuerte debate en el continente, con mandatarios de Francia, Alemania, Italia y España convocando una cumbre urgente en París para redefinir su estrategia en Ucrania. Mientras tanto, el Reino Unido ha comenzado a considerar el envío de tropas a Ucrania, una decisión que podría cambiar radicalmente la dinámica de la guerra.
Por otro lado, las tensiones internas en Alemania también aumentan, tras el apoyo del vicepresidente de EE.UU. a partidos de extrema derecha en el país, lo que ha causado indignación, especialmente entre los partidos tradicionales. Esta situación ha avivado aún más las fricciones en Europa, cuyo liderazgo parece estar cada vez más distanciado de las políticas de Trump.
Además, el presidente argentino Javier Milei enfrenta controversia tras promover una criptomoneda en su país que, tras un gran auge inicial, sufrió un desplome que provocó acusaciones de fraude en su contra.
La situación internacional se mantiene en un equilibrio inestable, con importantes decisiones a tomar en las próximas semanas.



