En medio de una crisis de incendios forestales en el sur de California, el senador Ben Allen reconoció que la ciudad de Los Ángeles no ha contado con los recursos necesarios para hacer frente a la magnitud de los recientes desastres. En una conversación con los medios, el senador expresó su preocupación por los limitados recursos disponibles, particularmente en el Departamento de Bomberos de la ciudad, el cual según informes recientes, tiene la mitad del personal que deberían tener otras grandes ciudades de EE. UU.
“Es obvio que hubo una falta de recursos”, afirmó Allen. “La alcaldesa tomó una decisión difícil en relación con el presupuesto de la ciudad, y lamentablemente los bomberos fueron una de las áreas afectadas”. El senador destacó que la situación financiera de Los Ángeles, con problemas presupuestarios derivados de demandas costosas, ha impactado la capacidad de la ciudad para responder adecuadamente a emergencias de gran escala.
La jefa de bomberos de Los Ángeles había expresado previamente su preocupación por esta escasez de personal, alertando que el Departamento de Bomberos de la ciudad se encuentra en una posición vulnerable para hacer frente a desastres como los incendios forestales. La situación se ha visto agravada por la presión económica, lo que ha llevado a la alcaldía a reducir el presupuesto en áreas clave, incluidos los bomberos.
Aunque el gobierno federal ha ofrecido un apoyo financiero de $770 millones para cubrir necesidades básicas, el senador Allen hizo un llamado a una mayor inversión en la infraestructura de seguridad y prevención de desastres, tanto a nivel local como federal. “Lo que necesitamos ahora es más recursos, no solo para nuestros bomberos, sino para la ciudad en general”, agregó.
Además, se discutieron las posibles repercusiones legales de la falta de recursos y la posible responsabilidad de las empresas de electricidad en el inicio de algunos de los incendios. Allen indicó que se están considerando demandas contra las agencias gubernamentales y las compañías de servicios públicos que podrían haber tenido un rol en los eventos que desataron los incendios, incluyendo el caso del incendio de Eaton.