Miguel Mejía, exministro y actual secretario general de Izquierda Unida, desató controversia al calificar al Palacio Nacional como un “vertedero” y criticar fuertemente la actual administración del presidente Luis Abinader.

Mejía, quien renunció a su puesto como ministro, explicó que aceptó el cargo en 2020 debido a su compromiso con el país durante la pandemia. Sin embargo, aclaró que su decisión no estuvo motivada por un interés político sino por un vínculo personal y familiar con la situación. A lo largo de su intervención, expresó su desacuerdo con varios aspectos del gobierno, desde la política exterior hasta la forma en que se maneja la diplomacia y las relaciones internacionales.

Uno de los momentos más polémicos fue cuando calificó de “fósiles” a algunos miembros del gobierno y cuestionó las decisiones diplomáticas, especialmente en relación con la postura hacia Venezuela y la intervención de actores externos. También destacó que las políticas del presidente Abinader estaban comprometiendo la imagen internacional del país, señalando que el gobierno dominicano estaba perdiendo su lugar en los procesos de integración regional.

La declaración de Mejía sobre el Palacio Nacional como un “vertedero” ha generado un intenso debate en la opinión pública, donde sus críticos lo acusan de falta de coherencia y respeto hacia las instituciones, mientras que sus seguidores consideran que sus palabras reflejan una realidad que debe ser cuestionada.