Durante la celebración de la eucaristía por el Día de Nuestra Señora de la Altagracia, Monseñor Jesús Castro Marte, obispo de la diócesis de Nuestra Señora de la Altagracia, criticó las repatriaciones de extranjeros, especialmente haitianos, y destacó su contribución a la economía dominicana.

En presencia del presidente Luis Abinader, Castro Marte afirmó que los trabajadores extranjeros son esenciales para sectores clave del país. “El ruido de una minoría acomplejada y manipulada no representa el espíritu amistoso, justo y solidario del pueblo dominicano”, señaló el obispo, al abogar por políticas que garanticen una estadía segura para los extranjeros que residen en el país.

El religioso también instó al gobierno y al sector empresarial a diseñar un plan integral que proteja los derechos de estos trabajadores, especialmente en el caso de los haitianos, quienes constituyen una parte significativa de la mano de obra en la construcción y la agricultura.

En otro orden, Monseñor Castro Marte criticó la lentitud del sistema de justicia dominicano, destacando la necesidad de mayores inversiones para mejorar su eficiencia. “El crecimiento económico y poblacional del país demanda un sistema judicial más robusto y justo“, afirmó.

Sus declaraciones encontraron eco en figuras como el expresidente Hipólito Mejía y el defensor del pueblo, Pablo Ulloa, quienes destacaron la urgencia de reformar el Código Penal y el Código Procesal Penal.

A la misa asistieron también la vicepresidenta Raquel Peña, la primera dama Raquel Arbaje, y otras personalidades del ámbito político y social del país.