Un devastador terremoto de magnitud 7.1 sacudió el oeste de China, cerca de la frontera con Nepal, causando graves daños y cobrando la vida de varias decenas de personas, según los primeros informes.
El epicentro se localizó a unos 380 kilómetros (240 millas) de la capital regional, donde la sacudida se sintió con fuerza, obligando a los habitantes a evacuar sus viviendas en pánico. El evento ocurrió en las primeras horas de la mañana, sorprendiendo a miles mientras dormían.
Equipos de rescate ya están en marcha para atender la emergencia, aunque la magnitud del daño estructural y humano aún está por confirmarse. Autoridades locales advierten que las réplicas podrían complicar las labores de rescate.
Esta región, ubicada cerca de importantes fallas tectónicas, es altamente propensa a terremotos de gran magnitud. Se espera un reporte más detallado en las próximas horas.