La gobernadora de Nueva York, Kathy Hochul, anunció este jueves que se desplegarán 1,050 nuevos oficiales de policía a partir del próximo lunes para reforzar la seguridad en el metro de la ciudad, el sistema de transporte público más grande de Estados Unidos. La medida, que forma parte de un plan para mejorar la seguridad en el sistema, contará con un presupuesto de 77 millones de dólares.

Hochul destacó que la mayoría de los delitos en el metro ocurren durante las horas nocturnas, y expresó su preocupación por el creciente nivel de ansiedad de los pasajeros durante esas horas. “Hay mucha ansiedad en estos trenes a altas horas de la noche. Quiero reducir eso”, comentó la gobernadora, añadiendo que con este incremento en la presencia policial se ha duplicado el número de agentes en el sistema de metro de la ciudad en solo un año. A pesar de los esfuerzos previos, la violencia en el sistema no ha cesado, y el reciente caso de una pasajera sin hogar que murió quemada en un vagón el 22 de diciembre resalta la gravedad de la situación.

En su discurso anual el martes, Hochul también adelantó la estrategia de seguridad, mencionando que los nuevos patrullajes se sumarán a los esfuerzos de los Guardias Nacionales, quienes han sido redistribuidos para reforzar el sistema de tránsito. Además, la gobernadora ha expresado su apoyo a una legislación que permita eliminar a las personas sin hogar del sistema de transporte.

Hochul también anunció que se intensificará la aplicación de la ley en las 30 estaciones del metro que representan el 50% de los delitos registrados en el sistema. Para combatir el creciente problema de evasión de tarifas, la gobernadora ordenó la instalación de torniquetes modernos en 40 estaciones antes de 2026, como parte de un plan a largo plazo para abordar las pérdidas financieras de la Autoridad Metropolitana de Transporte (MTA).

Este martes, la MTA instaló picos en los torniquetes de la estación 59th Street/Lexington Av en el Upper East Side, con la esperanza de disuadir a los pasajeros de usar los paneles para impulsarse y saltar, una táctica común entre los evasores de tarifas.