La crisis política en Corea del Sur ha alcanzado un nuevo punto álgido. El Parlamento del país ha votado este viernes a favor de destituir al presidente interino, Han Duck-soo, quien asumió el cargo tras la destitución de Yoon Suk-yeol el pasado 3 de diciembre.

La moción de destitución fue respaldada por todos los diputados presentes en la votación, sumando un total de 192 votos a favor. Esta decisión sin precedentes refleja la gravedad de la crisis política que atraviesa el país, especialmente en un momento en el que Corea del Sur enfrenta serias amenazas nucleares y desafíos económicos provenientes de su vecino, Corea del Norte. Además, la moneda nacional ha sufrido un desplome significativo, agravando la situación económica del país.

Han Duck-soo, quien había aceptado temporalmente el cargo tras la destitución de Yoon Suk-yeol, expresó su disposición a acatar la decisión del Congreso y prometió colaborar en la transición pacífica de poder. El ministro de Finanzas, Choi Sang-mok, ha asumido temporalmente las funciones presidenciales y se comprometió a reducir la tensión política.

La incertidumbre persiste, ya que el país necesita restaurar la estabilidad política en medio de un panorama interno y externo cada vez más complejo. La comunidad internacional sigue de cerca esta situación, mientras Corea del Sur enfrenta desafíos tanto políticos como económicos sin precedentes.