Manuel Cruz, prominente comentarista y político, salió al paso a las acusaciones de odio y discriminación contra los haitianos en República Dominicana, a raíz de las recientes manifestaciones en protesta por las deportaciones y la regularización migratoria. Cruz destacó que no existe un “discurso de odio” contra los migrantes haitianos, sino una postura clara y firme del gobierno dominicano sobre la seguridad y la regularización de los inmigrantes.
Cruz señaló que las organizaciones que apoyan a los migrantes haitianos no están siendo sinceras al acusar de odio a las autoridades dominicanas. Aseguró que los haitianos no son considerados inferiores, y ejemplificó cómo muchos de ellos trabajan en el país, desempeñando funciones esenciales en hogares y otros sectores. “Si consideramos a alguien inferior, no le permitiríamos cuidar a nuestros hijos ni vivir en nuestras casas”, enfatizó.
El comentarista destacó además que las autoridades dominicanas han sido comprensivas con los migrantes haitianos. Mencionó que durante el gobierno de Danilo Medina se llevó a cabo un proceso de regularización, una inversión significativa en recursos para legalizar a miles de haitianos. Aseguró que pocos países en el mundo se han mostrado tan abiertos a los migrantes como lo ha hecho la República Dominicana.
Con respecto a las recientes protestas, Cruz dejó claro que no está en contra de que los migrantes expresen sus demandas, pero criticó que las manifestaciones estuvieran basadas en falsos discursos de odio. “No estamos obligados a cargar con la miseria ajena”, afirmó, sugiriendo que si los migrantes no están satisfechos con las condiciones, deberían regresar a su país de origen.
Finalmente, Cruz también ofreció un consejo al político Juan Ariel Jiménez, al que consideró un joven prometedor, pero al que le recomendó moderar sus declaraciones públicas, en especial en cuanto a sus diferencias con el expresidente Danilo Medina.
El comentario de Manuel Cruz, realizado en un programa de radio, generó diversas reacciones tanto en favor como en contra, evidenciando la polarización que sigue existiendo en la República Dominicana sobre el tema de la migración haitiana.
