El comentarista Federico Jovine señaló que la problemática migratoria en República Dominicana no puede ser abordada únicamente desde la perspectiva de control fronterizo o persecución de inmigrantes en situación irregular. Jovine hizo un llamado a enfrentar las raíces del problema, incluyendo la complicidad de algunos sectores empresariales que se benefician de la mano de obra haitiana ilegal.

La mano de obra haitiana: necesidad y contradicción

Jovine destacó que la República Dominicana enfrenta una relación ambivalente con la migración haitiana:“Tenemos una relación de necesidad y rechazo. Utilizamos esta mano de obra para sectores como la agricultura y la construcción, pero tenemos más trabajadores de los que realmente necesitamos debido a la crisis humanitaria que vive Haití”, afirmó.

El comentarista insistió en que la crisis en Haití, caracterizada por la descomposición institucional y la pobreza extrema, ha desbordado las capacidades del Estado dominicano. “El problema ya no es solo económico; es una cuestión de supervivencia para muchos haitianos”, agregó.

Críticas a la falta de acciones contra empresarios

Jovine reconoció los esfuerzos de las autoridades migratorias, encabezadas por el vicealmirante Luis Rafael Lee Ballester, para implementar medidas respetuosas de los derechos humanos y sancionar a conductores, militares y redes de tráfico humano. Sin embargo, enfatizó que falta abordar una parte clave del problema: los empresarios que contratan y se benefician de esta mano de obra ilegal.

“Hasta que no veamos el nombre de los empresarios sometidos, propietarios de construcciones como la de Piantini, donde un agente migratorio fue atacado, seguiremos enfrentando este problema de manera parcial. Esos haitianos no llegaron con picos y palas desde la calle, las sacaron de la construcción donde trabajaban”, declaró Jovine.

De acuerdo con el artículo 132 de la Ley de Migración, los empleadores que contraten trabajadores ilegales deben ser sancionados con multas que oscilan entre 5 y 30 salarios mínimos por cada trabajador en situación irregular. Jovine instó a que estas sanciones se apliquen de manera efectiva y transparente.

Llamado a la acción

El comentarista cerró su intervención subrayando que la solución al problema migratorio requiere un enfoque integral que involucre no solo a las autoridades, sino también a quienes se benefician económicamente del sistema actual. “Cuando empecemos a sancionar a los empresarios responsables, las autoridades migratorias tendrán un trabajo más fácil y veremos un cambio real en esta problemática”, concluyó Jovine.

El debate sobre la migración haitiana en República Dominicana sigue siendo un tema de gran interés y controversia, con múltiples sectores involucrados en su compleja dinámica.