Funcionarios de salud británicos informaron que han identificado cuatro casos de una nueva y más infecciosa variante de la viruela símica (mpox), originada en la República Democrática del Congo, en lo que constituye el primer reporte fuera de África. Aunque los científicos aseguran que el riesgo para el público sigue siendo bajo, las autoridades están monitoreando de cerca la situación.

El primer caso de esta nueva variante fue anunciado la semana pasada, cuando un paciente que había viajado recientemente a países africanos con brotes activos, fue ingresado en un hospital de Londres. La persona está siendo tratada y, según los informes, su condición no es grave.

Esta semana, la Agencia de Seguridad Sanitaria del Reino Unido confirmó tres casos adicionales relacionados con el primero. Los nuevos pacientes viven en el mismo hogar que el caso inicial y están siendo atendidos en un hospital londinense. “La viruela símica es muy infecciosa en hogares con contacto cercano, por lo que no es inesperado ver más casos dentro de un mismo hogar”, explicó Susan Hopkins, principal asesora médica de la agencia.

La nueva variante de mpox fue detectada por primera vez a principios de este año en el este de la República Democrática del Congo. Aunque se cree que esta cepa causa síntomas más leves que son más difíciles de detectar, lo que facilita su propagación inadvertida. Su circulación en África llevó a la Organización Mundial de la Salud (OMS) a declarar una emergencia global en agosto, debido al creciente número de infecciones y muertes en la región.

Hasta la fecha, se han registrado más de 43,000 casos sospechosos de mpox en África, con más de 1,000 muertes, siendo la mayoría en la República Democrática del Congo. Además de los casos en el Reino Unido, la nueva variante ha causado brotes en Burundi, Kenia, Ruanda y Uganda, así como casos aislados en países como Suecia, India, Alemania y Tailandia.

En respuesta al brote, la OMS ha asignado 899,900 dosis de vacunas a nueve países africanos que enfrentan epidemias de viruela símica, en un esfuerzo por contener la propagación de la enfermedad.

Gran Bretaña ya había enfrentado un brote significativo de mpox en 2022, con más de 3,000 casos reportados a nivel nacional. Aunque la variante actual parece ser menos grave, las autoridades continúan investigando su impacto potencial y reforzando las medidas de prevención.