La Policía Nacional detuvo a Nazario Mercedes, un hombre de 65 años, en el municipio de Villa Altagracia, mientras intentaba enterrar el cuerpo de su expareja, Yessica Figueroa, de 32 años, a quien presuntamente asesinó a golpes la semana pasada. Este arresto ha destapado un historial oscuro de crímenes, ya que Mercedes confesó, durante los interrogatorios, haber asesinado a otras cinco mujeres en diferentes partes del país desde 1995.
El informe policial detalla que Mercedes fue sorprendido mientras intentaba ocultar el cadáver de Figueroa, cubriéndolo con fundas y zinc en el patio de su casa. De acuerdo con el acta de levantamiento de cadáver No. 88678, firmada por la médico legista, Figueroa falleció debido a un “trauma contuso abierto en la región occipital” y “shock hipovolémico”.
El arresto ha generado una reacción inmediata entre los familiares de las presuntas víctimas anteriores de Mercedes. En San Pedro de Macorís y San José de Ocoa, allegados de dos mujeres desaparecidas en las últimas décadas acudieron a presentar sus denuncias, sumando nuevos elementos a la investigación. Entre las víctimas figura Yanet Castillo, desaparecida en 1995 en San Pedro de Macorís; su hermana ha declarado que en aquella época Mercedes fue detenido brevemente, pero él afirmó que Castillo había intentado emigrar en yola a Puerto Rico.
Otras posibles víctimas
Las autoridades también han vinculado a Mercedes con otros casos, entre ellos el de Diana Carolina Lorenzo, asesinada en 2008 en el Ingenio Quisqueya, y el intento de homicidio de Rosa María Peralta en 2014 en Maimón, quien logró sobrevivir tras ser encontrada a tiempo. En total, las víctimas incluyen a:
El sobrino de Mercedes, Obispo Carmona, ha sido acusado de complicidad en el asesinato de Figueroa. Las autoridades señalaron que la confesión de Mercedes coincide con los reportes de desapariciones y muertes de estas mujeres en diferentes puntos del país, lo que indica un patrón de violencia extendido durante casi tres décadas.
Este martes, a las 9 de la mañana, un juez de Atención Permanente determinará las medidas de coerción a aplicar en el caso de Mercedes, mientras la Policía Nacional y el Ministerio Público continúan recolectando evidencia. La comunidad espera justicia en un caso que ha conmocionado al país y ha destapado una serie de crímenes que permanecieron ocultos por años.