A medida que se acerca el esperado debate presidencial, la vicepresidenta Kamala Harris y el expresidente Donald Trump intensifican sus esfuerzos para captar a los votantes indecisos, cuya decisión podría definir el resultado de las próximas elecciones. La ansiedad es palpable entre los residentes de estados clave como Pensilvania, donde la carrera está virtualmente empatada, según las últimas encuestas.
Inés González, una votante de Pensilvania, expresó su esperanza de que Harris derrote a Trump, a quien califica de “racista” y crítica por su tendencia a “humillar” a las personas, especialmente a las mujeres. Por otro lado, Wilbert Almonte, otro residente del estado, señaló que su voto estará influenciado por la economía. “Trump ayuda mucho a las personas. La economía está mejor cuando Harris está”, comentó, refiriéndose a los logros económicos que percibe bajo la administración Biden-Harris.
Fuentes cercanas a Harris indican que la vicepresidenta ha pasado días preparándose para el debate, participando en simulaciones y ensayando respuestas ante posibles ataques de Trump. Su equipo se centra en que Harris esté lista para responder con la verdad y mantener la calma, incluso si Trump recurre a insultos o ataques personales, lo cual ha sido una táctica común en sus debates anteriores.
Por su parte, los allegados a Trump aseguran que el expresidente está concentrado en temas específicos de política, como la retirada de Afganistán y la inflación, los cuales planea vincular directamente a Harris y al gobierno de Joe Biden. Durante su último acto de campaña, Trump no se contuvo al criticar duramente a la actual administración, calificando a sus líderes de “gente estúpida”. A pesar de que sus asesores le han recomendado evitar los ataques personales, muchos creen que es poco probable que siga este consejo.
Con un 28% de votantes aún indecisos, según un sondeo reciente, tanto Harris como Trump se están enfocando en este grupo crucial. El debate, que se transmitirá en vivo por Noticias Telemundo, promete ser un momento clave en la campaña, con ambos candidatos enfrentándose cara a cara en un esfuerzo por ganar el apoyo de los votantes en un momento crucial para la nación.