José Miguel Agramonte, el joven que había logrado escapar de la fortaleza Concepción de La Vega, fue entregado a la Policía Nacional por los residentes del Distrito Municipal de Cenoví, en San Francisco de Macorís.

La entrega, que se llevó a cabo de manera voluntaria por parte de los comunitarios, estuvo marcada por críticas hacia el accionar de los agentes policiales. A pesar de tratarse de una rendición pacífica, se reportaron episodios de maltrato tanto al detenido como a los mediadores.

“El accionar de la PN no fue adecuado. Si vamos a entregar a alguien como corresponde, no podemos permitir ese tipo de trato”, expresó el presidente de la Junta de Vecinos local.

El recluso, quien estaba detenido por herir a otra persona durante una riña, afirmó que temía por su vida dentro del penal y por eso decidió fugarse. Pidió que no lo trasladen de vuelta a la fortaleza Concepción de La Vega, alegando que hay amenazas de muerte en su contra.

Los residentes que facilitaron la entrega aseguraron que Agramonte se encuentra en buen estado de salud y expresaron su esperanza de que no sufra represalias tras ser llevado de vuelta a prisión.

Según fuentes cercanas al caso, Agramonte logró burlar la seguridad de la prisión al estar cerca de la pared trasera del recinto, la cual pudo sortear para escapar.