Estados Unidos se encuentra en un momento crucial en el camino hacia la legalización plena de la marihuana. Bajo el gobierno de Joe Biden, se está evaluando la reclasificación de esta planta como una droga menos peligrosa, lo que podría desencadenar importantes cambios económicos y legales en uno de los mercados más grandes del mundo. Según informes de la agencia Associated Press, la propuesta ya ha recibido la aprobación preliminar de la Administración para el Control de Drogas (DEA) y está siendo sometida a análisis por parte de la Casa Blanca.

Es fundamental destacar que esta medida representa un cambio regulatorio, no una despenalización total. Sin embargo, su impacto potencial es significativo, ya que podría resolver algunas discrepancias entre las leyes estatales y federales.

Actualmente, 38 estados permiten la venta de marihuana para uso medicinal, y 24 de estos también han legalizado su comercio para fines recreativos. A pesar de esta tendencia a nivel estatal, la marihuana sigue siendo considerada ilegal a nivel federal, lo que crea incertidumbre y zonas grises en la industria, valuada en aproximadamente 30.000 millones de dólares.