El comunicador y político Virgilio Feliz ha profundizado en sus comentarios sobre la reciente entrevista realizada al expresidente, Leonel Fernández, durante su participación en el programa “El Despertador”. En particular, Feliz ha resaltado un fragmento clave de la entrevista, donde Fernández fue cuestionado sobre su gesto hacia el también exmandatario del país, Danilo Medina.

En su respuesta, Fernández hizo hincapié en que el encuentro con Medina no fue un gesto de reconciliación, sino más bien una demanda de garantías electorales. Esta declaración provocó la reflexión de Feliz, quien comparó la situación con el “abrazo del borracho”, una metáfora que ilustra una alianza forzada por las circunstancias, más que por un genuino afecto.

La expresión “abrazo del borracho” evoca la idea de dos personas que se abrazan porque están perdiendo el equilibrio y necesitan sostenerse mutuamente, más que por un sentimiento real de camaradería. Feliz utilizó esta analogía para subrayar su escepticismo respecto a la genuinidad de la relación entre Fernández y Medina, insinuando que su encuentro fue motivado más por consideraciones políticas que por un verdadero deseo de reconciliación.