Tras la captura del asesino convicto Danelo Cabalgante, han salido a la luz detalles sorprendentes sobre cómo logró sobrevivir y evadir a cientos de oficiales que lo buscaron durante 13 días después de su fuga de una prisión en Pensilvania.

Un día después de su captura, la pesadilla llegó a su fin para la comunidad del condado de Chester. Cabalgante fue encontrado comiendo fruta de una granja y tomando agua de un arroyo. Tenía la intención de robar otro automóvil para huir del estado. Ahora, como el recluso QP8931, se encuentra en su nuevo hogar, la Institución Correccional Estatal de Alta Tecnología y Seguridad Fénix en el condado de Montgomery.

Horas después de su arresto, Cabalgante confesó a los investigadores cómo logró burlar a los equipos de la fuerza del orden que lo buscaron durante casi dos semanas. Este hombre de 34 años se refugió en zonas boscosas, moviéndose únicamente de noche. Sin embargo, su táctica no fue completamente exitosa, ya que fue visto dentro de casas y captado por cámaras de seguridad.

Además, robó una camioneta y se presentó en puertas reconocidas. Cuando robó un rifle, tuvo que huir después de que el dueño del arma le disparara. Según un agente federal, el objetivo final de Cabalgante era robar otro automóvil y utilizar el rifle para dirigirse a Canadá o Puerto Rico.

Cabalgante también confesó que sabía que en algún momento tendría que enfrentar las consecuencias por el asesinato de su novia. Aunque consideró entregarse debido a la intensa búsqueda de oficiales, no estaba dispuesto a poner en riesgo su vida.

En este momento, Cabalgante enfrenta una posible cadena perpetua por su crimen y ahora se le acusa de un delito grave de fuga. Deberá comparecer ante un tribunal de Pensilvania el 27 de septiembre para enfrentar estas nuevas acusaciones.