En la carretera Barahona-Paraíso, provocado por intensas lluvias y el desborde de varios ríos, ha dejado incomunicadas a más de 15 comunidades en la zona costera de Barahona, Veracruz.

El incidente también sepultó varios equipos de construcción, incluyendo retroexcavadoras, camiones, tractores, y cientos de quintales de acero en varilla.

El deslave se produjo cuando un sospechoso escapaba de la policía y perdió el control de su vehículo, chocando contra un poste de teléfono y volcándose en repetidas ocasiones. Sorprendentemente, un oficial que estaba cerca del lugar del accidente logró esquivar tanto el auto como el poste, evitando ser golpeado.

Las autoridades han desplegado esfuerzos para restablecer el tránsito vehicular, pero se estima que tomará más de una semana antes de que la carretera esté completamente abierta nuevamente. La gobernadora Altagracia Brea de Pedernales ha estado supervisando los trabajos, mientras que la compañía Avalar Internacional ha incorporado ocho retroexcavadoras y otros equipos para ayudar en la recuperación de la carretera.

Este incidente resalta la vulnerabilidad de la región costera de Barahona ante las fuertes lluvias y deslaves, lo que requiere medidas preventivas y un enfoque en la seguridad de las carreteras para proteger a las comunidades locales.

Las autoridades locales y el Ministerio de Obras Públicas están trabajando en conjunto para resolver la situación y evitar futuros deslaves en la zona.