En La Habana, durante la cumbre del G77+China, el presidente Luis Abinader, abordó un tema candente que ha afectado las relaciones con su vecino Haití.

El mandatario destacó que el reciente conflicto fronterizo con Haití es resultado de las acciones de “un grupo de anarquistas que buscan desestabilizar el Gobierno” haitiano.

La situación se agravó cuando, en represalia a la construcción de un canal de riego en el río Masacre desde el lado haitiano, Abinader ordenó el cierre total de la frontera dominicana con Haití. En una declaración a los medios, el presidente subrayó que esta medida se tomó para detener un canal con un diseño inadecuado impulsado por grupos privados.

Además, expresó su preocupación por la falta de acción de un Gobierno central fuerte cuando estos grupos anárquicos toman decisiones que afectan a ambos países.

El presidente Abinader también enfatizó la necesidad de llevar la tranquilidad a Haití a través de misiones pacificadoras en medio de este conflicto.

En la cumbre, hizo un llamado a impulsar un sistema regional de inteligencia artificial en Latinoamérica y el Caribe, resaltando la importancia de la colaboración regional en la era de la tecnología.