El papa Francisco anunció la visita en agosto a la ciudad de L’Aquila, en el centro de Italia, para una festividad iniciada por el papa Celestino V, uno de los pocos pontífices que renunció antes de que el Papa Benedicto XVI dimitiera en 2013. El anuncio ha alimentado los rumores de que el pontífice podría estar planeando retirarse, al igual que su predecesor.

Recientemente, dados los crecientes problemas de movilidad de Francisco, que lo han obligado a ir en silla de ruedas, los medios italianos y católicos han estado especulando, sin fuentes ni evidencias, de que el Papa, de 85 años, podría estar pensando en retirarse.

Esos rumores cobraron fuerza la semana pasada cuando Francisco anunció un consistorio para el 27 de agosto para nombrar 21 nuevos cardenales, de los cuales, 16 tienen menos de 80 años y serían elegibles para convertirse en su sucesor.