El presunto cabecilla de la red criminal denominada “Discovery”, Sucre Rafael Rodríguez Ortiz (Darimán y/o Dari), y propietario del “call center”, dirigía las extorsiones a envejecientes residentes en los EE. UU. mediante llamadas “sextorsión”.

Así consta en la orden de arresto contra los implicados de la estructura criminal, donde se indica que Sucre Rafael, junto a sus hermanos José Eliezer y Sarah Altagracia Kimberly, instalaron centros de llamadas en Santiago, La Vega, Puerto Plata y Santo Domingo, que realizaban múltiples estafas bajo un esquema organizado y ejecutado por un gran equipo.