“Ni mi esposa, ni mis hijos, ni mis hermanos, ni mis tíos, ni mis sobrinos, cuñados o primos son suplidores del Inabie, ni del Minerd”, asegura el titular del Ministerio de Educación, Roberto Fulcar.

Su aclaración la hace porque, según afirma, sectores económicos con interés de que continúe “todo como antes” o con aspiraciones a dirigir o controlar la gestión o las operaciones administrativas de ese ministerio buscan desacreditarlo.

Atribuye la supuesta “campaña” en su contra a que “no perdonan la instauración de una práctica participativa, ética, eficiente y transparente” realizada por su gestión.