El Salón de la Fama de Cooperstown anunció el ingreso de David Ortiz a la legión de inmortales. Es el cuarto dominicano que entra al selecto club.

Con 541 cuadrangulares de por vida y uno de los bateadores más prolíficos de la historia de la pretemporada, Ortiz se encargó de romper la “Maldición del Bambino” junto a los Medias Rojas de Boston y no se conformó con eso, sino que agregó dos campeonatos más en un período de nueve años para convertirse, además, en una de las figuras más queridas de todo el béisbol.

El Big Papi, como se le llama popularmente, recibió la llamada en Santo Domingo acompañado de su familia y Pedro Martínez, su amigo y uno de los cuatro dominicanos exaltados a Cooperstown.