Francisco Pagán, quien se desempeñó como director de la Oficina Supervisora de Obras del Estado (Oisoe) y es acusado en el caso de corrupción Operación Antipulpo, además de haber adquirido una enorme propiedad en Tamayo, donde opera una mina de extracción de materiales de construcción, también habría adelantado RD$25 millones para la adquisición de una planta para procesar cemento.

Esto se desprende de la acusación presentada por la Procuraduría Especializada de Persecución de la Corrupción Administrativa (Pepca), en la cual se asegura que la planta de cemento asfáltico que compraría Pagán está ubicada en la sesión Orégano Chiquito, distrito municipal de Tábara Abajo, provincia Azua, y sería adquirida a una persona identificada como Bolívar Antonio Ventura Rodríguez.