Su deseo fue cumplido. Adán Arana, un hombre que se dedicaba a la pesca, pidió que lo sepultaran con su camioneta en el panteón de Puerto San Carlos dentro de la comunidad de Comondú, Baja California Sur.
Su deseo fue cumplido. Adán Arana, un hombre que se dedicaba a la pesca, pidió que lo sepultaran con su camioneta en el panteón de Puerto San Carlos dentro de la comunidad de Comondú, Baja California Sur.