Las balas se hacen protagonistas de nuevo en Guanajuato. Una familia entera masacrada y una balacera en una fiesta infantil dejan un resultado fatal de 11 muertos en las últimas horas, entre ellos niños de muy corta edad. Una criatura de ocho meses sobrevivió a los ataques.

En la calle Caseros de Apaseo el Grande, sicarios entraron en la noche del sábado en una vivienda y mataron a cinco personas, aunque los medios locales cuentan seis: cuatro mujeres, un joven de unos 20 años y una niña de tres. Cuando llegó la policía las balas habían regado con violencia la casa. Por el momento no se ha informado de detenidos a pesar del despliegue policial.