Las opciones para los miles de migrantes haitianos situados a ambos lados de la frontera de México y Texas se redujeron este martes, luego de que el gobierno de Estados Unidos aceleró los vuelos de expulsión a Haití y México comenzó a sacar a algunos de la zona en avión y autobús.

Más de 6,000 haitianos y otros migrantes han sido desalojados de un campamento en Del Río, Texas, dijeron las autoridades estadounidenses el lunes, al defender una operación contundente que incluyó la expulsión inmediata de migrantes a su empobrecido país caribeño. Las autoridades estadounidenses han sido criticadas por utilizar patrullas a caballo para impedir que la gente entre a Texas.