La operación también resultó en la puesta en libertad de tres agentes de la Policía que habían sido secuestrados por los supuestos autores del magnicidio.
Los presuntos asesinos fueron interceptados por la Policía tras un intenso tiroteo en el sector de Pelerin, donde se encuentra la residencia de Moise, “poco antes de las 6 de la tarde”, según adelantó el secretario de Estado de Comunicación, Frantz Exantus, a través de Twitter.