Las expresiones de indignación se multiplican hoy en Perú por el asesinato del dirigente amazónico Marcos López Huanca, ultimado de un disparo en la cabeza presuntamente por narcotraficantes o depredadores invasores de territorios nativos.

El líder de la comunidad nativa de Shirarine, de la provincia de Oxapampa, en la parte amazónica de la región centroandina de Pasco, fue asesinado el lunes último, confirmaron en un comunicado conjunto los ministerios del Ambiente, Interior y Justicia y Derechos Humanos.

La declaración expresa condolencias y condena el crimen y consigna el compromiso de no escatimar esfuerzos a fin de esclarecer el hecho para la sanción a los responsables, para que no queden impunes.