Con “un peso menos encima”. Así es que como dijo sentirse Alexis Joel Hernández al recibir la noticia de que la factura médica de $1.7 millones que debía a un hospital de San Antonio, Texas, fue perdonada.

La deuda que Hernández, de 24 años, tenía con el Brooke Army Medical Center era por los tratamientos que recibió al ser ingresado con quemaduras de segundo y tercer grado en el 70 por ciento de su cuerpo tras el estallido de un calentador el 19 de enero de 2019. La explosión ocurrió en su departamento en Jalisco, México, donde el joven estaba supuesto a comenzar sus estudios de medicina en la Universidad Autónoma de Guadalajara.