Mientras las jornadas de vacunación se intensifican en el país y cerca del 50 % de la población meta ha recibido al menos una dosis del biológico, familiares luchan con la angustia y la desesperación de tener un paciente con COVID-19, no solo por la falta de cama de los centros a donde se dirigen, sino también por la poca información que reciben de sus parientes, el miedo a que le notifiquen su fallecimiento y el dolor ante la pérdida.

El Ministerio de Salud Pública informó que este lunes, el 77 % de las camas para pacientes críticos con coronavirus estaban ocupadas, el 51 % de las de ingresos y 66 % de los ventiladores. En tanto, la positividad diaria del virus se sitúa en 18.76 %, mientras que la de las últimas cuatro semanas fue de 16.95 %.