Este lunes siete ex miembros del personal de jardinería y mantenimiento que trabajaron en la mansión de USD 60 millones que Kim Kardashian tiene en la exclusiva urbanización de Hidden Hills, California, han presentado una demanda colectiva en su contra acusándola de no pagar a tiempo sus salarios y de retener el 10% de los mismos para cubrir impuestos.



También sostienen que la celebridad se negaba a recompensarles por las horas extras y que no podían realizar pausas para comer a lo largo de la jornada laboral, según informó este miércoles Page Six del periódico New York Post.