Decenas de personas protestaron esta mañana en la sede de la Lotería Nacional por la cancelación de más de 20 empleados no videntes, a raíz del fraude cometido en un sorteo, por lo que están siendo investidos varios servidores de la entidad.

Con pancartas en mano, asociaciones de ciegos y discapacitados reclamaron del presidente Luis Abinader reponer en sus puestos a 34 no videntes desvinculados de la Lotería la pasada semana.

Entre los afectados se encuentra una señora embarazada, que estaba de licencia en su casa.