Desgraciadamente, muchos países en el mundo conviven día a día con la corrupción de sus dirigentes políticos, una corrupción que para nada favorece al país y que solo lastra el crecimiento de sus economías. En la última década, ya sea por el avance tecnológico o por la presión que ejercen los medios de comunicación, se han destapado muchísimos casos de corrupción, dejando en entredicho el que existan representantes políticos que no lo hagan.

Obviamente, la corrupción es algo que ha existido a lo largo de la historia, con lo que no es nada nuevo. Aunque, como decíamos anteriormente, la presión y el fortalecimiento que han experimentado los medios de comunicación, junto con la situación de tensiones políticas entre gobernantes y oposición, han llevado a que destapar este tipo de casos sea la mejor arma de batalla en las campañas políticas.