Las autoridades han establecido que el mayor general del Ejército Adán Cáceres Silvestre y la pastora Rossy Guzmán Sánchez, quien es, además, asimilada de la Policía Nacional, crearon una red militar-policial y religioso para distraer fondos del patrimonio púbico y en este entramado está implicado el expresidente Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD).

Las investigaciones del Ministerio Público arrojaron que el vicealmirante Félix Alburquerque Comprés, quien comenzó a dirigir la DNCD en enero de 2019, se asoció con Cáceres Silvestre para desfalcar el Estado dominicano mediante el desvío de fondos de la entidad a la cuenta de la empresa disfrazada de organización sin fines de lucro, Asociación Campesina Madre Tierra.

La asociación no estaba inscrita como suplidora del Estado, sin embargo, explica el órgano acusador, esta reflejó un pago de la DNCD por concepto de compra de huevos por un valor de 525 mil pesos.