El tema de la reelección de Abinader surge cuando se co­mienza a percibir una conso­lidación de sus ejecutorias y una reactivación económi­ca. Organismos internacio­nales como el Banco Mundial han elevado su pronóstico a un crecimiento de 5.5% para el cierre de este año, cifra que supera el 4.4% para la región de América Latina.

Iguales informaciones se obtienen del Fondo Mone­tario Internacional (FMI), mientras la firma califica­dora de riesgo crediticio Moody’s y el Bank of Ameri­ca prevén un crecimiento de 6% de su Producto Interno Bruto (PIB).

Tampoco pasa desapercibi­do que el presidente Abinader exhiba un protagonismo casi absoluto en todas las áreas de su gobierno, que ha comenza­do a extenderse a organiza­ciones comunitarias. De ahí el impacto provocado por la in­formación de que en el PRM se discute modificar los es­tatutos, para permitir que el mandatario pueda optar por la reelección otro período y nunca más como establece la Constitución.