Un giro sorprendente en un caso que trata de la joven madre Boricua que fue condenada a 111 años de prisión por estar vinculada al asesinato de su hermano mientras aseguraba que era completamente inocente.
Gracias a un ejecutivo logró salir de la cárcel y nos cuenta sobre su historia y esta segunda oportunidad que se le ha presentado para que todos se den cuenta de su inocencia.