Santiago, R.D. – Profunda consternación ha causado en la comunidad de Pekín, al sur de Santiago, el fallecimiento de Angélica Herrera, una adolescente de 17 años que fue hallada sin vida en su residencia, tras quitarse la vida por ahorcamiento. El hecho ocurrió en horas de la noche y ha generado una ola de tristeza entre familiares, vecinos y compañeros de estudios, quienes la describen como una joven querida y sin aparentes problemas visibles.
Horas antes de su muerte, Angélica publicó una imagen en sus redes sociales con una frase cargada de simbolismo: “Jesucristo, ¿hay un lugar para mí en tu muro?”, lo que ahora es interpretado por muchos como un llamado de auxilio que pasó desapercibido. Según declaraciones de su padre, la joven no había manifestado señales claras de depresión ni conflictos familiares, aunque reconoció que días antes había acudido a una clínica, sin ofrecer mayores detalles sobre su estado de salud.
El cuerpo de Angélica fue llevado a la morgue del Hospital Regional José María Cabral y Báez, donde se espera que el médico legista determine con precisión las circunstancias del fallecimiento. Mientras tanto, autoridades y profesionales de la salud mental reiteran el llamado a estar atentos a las señales emocionales de los adolescentes y fomentar espacios seguros de escucha, ante el preocupante aumento de casos de suicidio juvenil en el país.



