Crece la preocupación internacional por la popularización del reto “Charlie Charlie”, una práctica viral que simula una invocación de espíritus con solo una hoja de papel y dos lápices. A pesar de parecer inofensivo, este juego ha sido catalogado por expertos como una ouija moderna, y se advierte que podría representar riesgos psicológicos y espirituales para quienes lo practican sin preparación.
La dinámica —que ha ganado fuerza en países como Estados Unidos, México, República Dominicana y gran parte de Europa— consiste en hacer preguntas a un supuesto espíritu llamado “Charlie”, esperando respuestas a través del movimiento de los lápices. En redes sociales, circulan videos en los que puertas se cierran repentinamente o se producen reacciones de miedo extremo entre los participantes, muchos de ellos menores de edad.
Espiritistas y educadores han coincidido en que no se trata de un simple juego. Algunos especialistas advierten que prácticas de este tipo podrían abrir “puertas energéticas peligrosas” y afectar a jóvenes emocionalmente vulnerables. En República Dominicana, incluso se han reportado incidentes dentro de salones de clase, lo que ha llevado a profesores a solicitar la intervención de las autoridades para frenar esta tendencia.



