A pesar de los esfuerzos de muchos dominicanos que viven en el extranjero y regresan al país cargados de regalos para sus familiares, el problema del robo y daño a sus pertenencias en el aeropuerto sigue sin solución. Este problema recurrente afecta a miles de viajeros cada año, generando frustración y descontento entre los afectados.

Los viajeros denuncian que, al llegar al aeropuerto, encuentran sus maletas destrozadas y descubren que muchos de los artículos que trajeron consigo han desaparecido. Este fenómeno no solo representa una pérdida económica para los afectados, sino que también erosiona la confianza en las autoridades aeroportuarias y en la capacidad del país para resolver problemas logísticos y de seguridad.

El sentido de pertenencia y el deseo de regresar a su país de origen es fuerte entre los dominicanos que viven en el extranjero. Sin embargo, enfrentarse repetidamente al robo y al daño de sus pertenencias mina ese entusiasmo. Los dominicanos en el extranjero son conocidos por su solidaridad y generosidad, enviando regularmente remesas y regalos a sus familias. El hecho de que estos regalos sean robados o dañados al llegar al país es una situación que podría evitarse con medidas de seguridad más estrictas y una gestión más eficiente en los aeropuertos.

A pesar de las repetidas denuncias y quejas, el problema persiste. Cada año, los mismos incidentes se repiten, y la falta de una solución concreta por parte de las autoridades es desalentadora. La situación exige una respuesta urgente y efectiva que garantice la seguridad de las pertenencias de los viajeros y la integridad de sus maletas.

El continuo fracaso en resolver este problema no solo afecta a los individuos, sino que también proyecta una imagen negativa del país. Una solución adecuada fortalecería la confianza de los viajeros y mejoraría la percepción internacional del sistema aeroportuario de la República Dominicana.

Es crucial que las autoridades tomen medidas inmediatas para abordar este problema. Implementar un control más riguroso en el manejo de equipaje y aumentar la vigilancia en las áreas de carga y descarga podría ser un paso inicial significativo. La resolución de este problema es fundamental para asegurar que las visitas de los dominicanos que viven en el extranjero estén marcadas por la alegría y la celebración, en lugar de la frustración y la pérdida.