El exdirector  del Instituto Nacional de Tránsito y Transporte Terrestre (INTRANT), Hugo Beras, realizó declaraciones contundentes sobre las irregularidades en el proceso de licitación con la empresa Transcore, que ha levantado un fuerte revuelo mediático en las últimas semanas. Vera acusó a los organismos de control del Estado de no cumplir con sus funciones, dejando claro que “los sistemas en el país no están funcionando, y estamos expuestos”.

Durante su intervención, reveló que decidió hablar tras un año de silencio para aclarar su papel en la investigación que actualmente lo involucra. Mencionó que su decisión de mantener el silencio se debió a la prudencia, en un proceso que inicialmente debía ser evaluado con seriedad y respetando las instituciones involucradas.

A lo largo de su exposición, Beras argumentó que, a pesar de haber solicitado la supervisión de organismos como la Dirección de Compras y Contrataciones y la Contraloría, se tomaron decisiones sin previo aviso y que, a su juicio, configuraron un sistema ineficaz de control y supervisión. “El único que tomó la decisión de responsabilidad ante el país fui yo”, enfatizó, al señalar su renuncia como una forma de asumir la responsabilidad en medio de la controversia.

Además, afirmó que la adjudicación del contrato a Transcore cumplía con todos los requisitos legales y que la empresa había sido seleccionada tras un proceso transparente. Sin embargo, se mostró sorprendido por la rapidez con la que se desarrollaron los acontecimientos tras la firma del contrato, mencionando que solo 48 horas después de recibir notificaciones de irregularidades, la situación escaló a ruedas de prensa y acusaciones en su contra.

Beras no descartó la posibilidad de acciones legales para recuperar su honor y prestigio, y dejó entrever que la situación que enfrenta puede ser parte de un esquema más amplio de descontrol y falta de transparencia en la administración pública.

Finalmente, el exfuncionario hizo un llamado a la reflexión sobre la importancia de fortalecer los mecanismos de control del Estado, advirtiendo que la ineficacia de estos organismos podría tener graves consecuencias no solo para él, sino para el país en general. “Estamos expuestos, y si no se corrigen estos sistemas, será difícil avanzar en la lucha contra la corrupción”, concluyó.