Padres y madres de niños con autismo continúan luchando por una sociedad más inclusiva en la República Dominicana, reclamando mayores oportunidades educativas, atención especializada y sensibilidad social hacia esta condición del neurodesarrollo.

Durante una actividad conmemorativa por el segundo aniversario del programa “Azul Podcast”, que busca educar y concienciar sobre el autismo, varias familias compartieron testimonios sobre los retos que enfrentan día a día para acceder a terapias, educación adecuada y comprensión social.

“Todavía hay demasiadas barreras, especialmente en el sistema educativo. Muchos niños no reciben los apoyos necesarios en las escuelas”, expresó una de las madres participantes. Otro de los asistentes destacó la falta de empatía y la carga emocional que recae sobre los cuidadores, quienes en muchos casos deben convertirse en activistas para lograr que se respeten los derechos de sus hijos.

Ante esta realidad, un grupo de especialistas anunció la apertura de un nuevo centro de terapias a mediados del próximo año, que ofrecerá servicios de lenguaje, conducta y apoyo psicológico para niños con autismo. “Es triste que los padres tengan que pasar, por tanto, para encontrar un espacio adecuado. Por eso nos comprometimos a que este centro sea una esperanza real”, afirmó una de las promotoras del proyecto.

Los participantes coincidieron en que el país necesita mayor voluntad política, formación profesional y campañas de sensibilización que garanticen una verdadera inclusión. “La mejor herencia que podemos dejar a nuestros hijos es una sociedad más justa y empática”, concluyó una madre.

Autismo

El autismo, también conocido como Trastorno del Espectro Autista (TEA), es una condición del neurodesarrollo que afecta la forma en que una persona se comunica, se relaciona con los demás y percibe el mundo que la rodea. Las personas con autismo pueden presentar dificultades en la interacción social, en el lenguaje verbal y no verbal, así como patrones repetitivos de comportamiento o intereses muy específicos. No se trata de una enfermedad, sino de una manera diferente de procesar la información y experimentar la realidad.

Este trastorno se manifiesta desde la infancia y puede variar significativamente de una persona a otra: algunos requieren apoyo constante, mientras que otros logran una vida independiente. Aunque no tiene cura, la detección temprana, la educación inclusiva y las terapias especializadas pueden mejorar notablemente la calidad de vida y el desarrollo de quienes están dentro del espectro. La comprensión y la empatía de la sociedad también son fundamentales para fomentar la inclusión y el respeto hacia las personas con autismo y sus familias.