La persistencia de los apagones y el aumento sostenido en las tarifas eléctricas mantienen en frustración a los residentes de diversos sectores del país, quienes aseguran estar viviendo una de las peores crisis energéticas de los últimos meses. De acuerdo con un reporte del canal NTelemicro5, en zonas como Villa Francisca, San Carlos, Invivienda, El Almirante y Los Mameyes, los cortes de electricidad pueden extenderse hasta por ocho horas diarias, afectando la rutina, la economía y la salud de los ciudadanos.

Vecinos de estos sectores calificaron la situación como “increíble y terrible”, alegando que el calor y la falta de ventilación les impiden dormir por las noches. Algunos aseguran que sus hogares duran más tiempo sin energía que con ella, y que muchos se ven obligados a dormir en los techos o dejar las puertas abiertas para soportar las altas temperaturas. “Esto es insoportable, uno no puede descansar ni trabajar tranquilo”, expresó una residente de Invivienda entrevistada por el medio.

A la larga duración de los apagones se suma el aumento en la factura eléctrica, un fenómeno que ha desatado aún más indignación entre los usuarios. “No hay luz, pero la factura llega carísima”, denunció un ciudadano, quien explicó que con solo dos bombillos y dos abanicos está pagando hasta 1,800 pesos mensuales, mientras que otro relató que su consumo habitual, que antes era de 800 pesos, ahora se duplicó a 1,600 sin explicación aparente.

Aunque algunos consultados reconocen que en los últimos días los apagones se han reducido, aseguran que el incremento en el costo del servicio sigue siendo su principal dolor de cabeza. En medio de la inconformidad general, los ciudadanos reclaman mayor transparencia en la facturación eléctrica y piden que las autoridades investiguen las causas de las variaciones en el cobro y la persistencia de los cortes.

Los usuarios también exhortaron al Gobierno y a las distribuidoras a mejorar la gestión del servicio energético, garantizar una distribución más equitativa y establecer medidas concretas que alivien el impacto económico en los hogares. “Queremos luz y justicia en la factura”, expresó un residente de Villa Francisca, reflejando el clamor colectivo de miles de dominicanos afectados por la crisis eléctrica.