Santo Domingo. – El Presidente Luis Abinader ofreció un discurso este domingo 6 de abril, en el que abordó los desafíos que enfrenta la República Dominicana debido a la crisis en Haití, destacando que, aunque el país no es responsable de las crisis en su vecino, sí enfrenta sus consecuencias. Abinader reconoció las preocupaciones de los dominicanos sobre la migración irregular, los riesgos para la seguridad, y la carga que representa para los servicios públicos.

El mandatario enfatizó que, durante los últimos cinco años, su gobierno ha actuado con responsabilidad frente a una situación que se ha ido agravando, destacando la firmeza con la que se ha actuado para proteger la frontera. “Nuestra frontera está más vigilada que nunca”, aseguró, mencionando el incremento de militares y la construcción de un muro fronterizo para frenar el ingreso de migrantes ilegales.

Abinader también anunció un conjunto de 15 medidas, incluidas reformas migratorias, sanciones más duras para quienes faciliten la migración irregular, y una mayor supervisión de los hospitales públicos para controlar la afluencia de personas en condición irregular. Además, indicó que el gobierno impulsará la “domínicanización del empleo” en sectores como la construcción y las zonas francas, promoviendo aumentos salariales y la mecanización de la agricultura.

El presidente hizo un llamado a la unidad nacional y a la cooperación internacional, subrayando que la República Dominicana no puede cargar con la crisis de Haití sin el apoyo de la comunidad internacional. “Nuestro desarrollo no puede depender de la ilegalidad“, afirmó, reiterando que la soberanía del país no está en negociación.