PRM Pone Freno a Funcionarios con Aspiraciones Políticas; Se Exige Concentración Total en la Gestión

El Partido Revolucionario Moderno (PRM) ha emitido una directriz clara y contundente para resolver las tensiones internas generadas por las aspiraciones políticas de algunos de sus miembros. La medida busca asegurar que los funcionarios que ocupan cargos en el Gobierno de Luis Abinader detengan cualquier actividad proselitista y dediquen sus esfuerzos exclusivamente a sus responsabilidades gubernamentales. Esta decisión pone un alto a los “presidenciables” del 2028 que aún se encuentran activos.

Las advertencias iniciales fueron formuladas con energía por el propio presidente Luis Abinader, quien dejó claro que cualquier funcionario con aspiraciones de presentarse a la contienda de 2028 debía abandonar su cargo de inmediato. Esta posición, que generó roces verbales a lo interno del partido, fue posteriormente ratificada por el presidente del PRM, José Ignacio Paliza, subrayando la seriedad de la orden.

Según la dirigencia del PRM, el conflicto y el debate interno sobre este tema ya han sido resueltos. La confirmación provino de la directora de Ética Gubernamental, Milagros Ortiz Bosch, quien aseguró que el asunto fue abordado y clarificado durante una reciente plenaria de la plana mayor del partido celebrada en Jarabacoa.

Ortiz Bosch explicó que, tras el “llamado al orden” del presidente Abinader, los compañeros que habían estado promoviendo diversas precandidaturas —tanto a nivel presidencial como local— han cesado sus actividades. La prioridad ahora es que todos los miembros concentren su trabajo en la ejecución de políticas públicas y en sus funciones asignadas.

El mensaje clave es que los funcionarios deben centrarse en los resultados de su gestión, con miras al desarrollo y el bienestar del país, en lugar de distraer recursos y tiempo en la promoción personal. Esta posición fortalece la imagen de un gobierno enfocado en la administración, distanciándose de las campañas políticas prematuras.

De esta forma, la cúpula del PRM busca cerrar la puerta a las aspiraciones anticipadas y mantener la disciplina, asegurando que los funcionarios del Gobierno con miras al 2028 se mantengan completamente concentrados en sus responsabilidades gubernamentales, tal como se acordó en el seminario de Jarabacoa.