Joven motoconcho de Cañafistol muere en trágico accidente en Baní:  “¡fue aplastado por patana!”

BANÍ.– Un fatal accidente de tránsito enluta a la comunidad de Cañafistol tras la muerte del joven motoconcho Juan Carlos Peña Peña, conocido como “Geisis”, de 23 años, ocurrido la mañana de este jueves en la carretera Sánchez, a la altura del kilómetro 2, en la salida de Baní hacia Azúa.

Según reportes, Peña Peña se desplazaba en una motocicleta en alta velocidad, cuando chocó por la parte trasera contra una camioneta y cayó al suelo en el lado derecho de la vía. En ese momento fue embestido de frente por una patana, lo que le causó heridas graves. Fue trasladado al hospital Nuestra Señora de Regla, donde lamentablemente falleció mientras recibía atención médica.

Las autoridades de la Dirección General de Seguridad de Tránsito y Transporte Terrestre (DIGESETT) recogieron evidencias, incluyendo videos de cámaras de vigilancia instaladas en negocios cercanos, para esclarecer las circunstancias del accidente. La tragedia ha causado gran conmoción en el barrio Las Tuallitas, donde residía el joven, conocido por ser un trabajador esforzado que día a día salía a ganar el sustento para su familia.

El cuerpo fue levantado por la médico legista Dra. Denia Guerrero, en presencia de la magistrada y agentes de la DIGESETT, y entregado a sus familiares. Los restos de Juan Carlos Peña serán velados en su comunidad de Cañafistol, específicamente en el barrio Las Tuallitas.

En la República Dominicana, los motoristas, comúnmente conocidos como motoconchos, representan un medio de transporte muy utilizado, especialmente en zonas urbanas y rurales donde el acceso a otros vehículos es limitado. Sin embargo, uno de los problemas recurrentes en este sector es la tendencia a conducir a altas velocidades, muchas veces sin respetar las normas de tránsito, lo que incrementa significativamente el riesgo de accidentes.

La presión por cumplir con múltiples viajes diarios, la competencia entre motoristas y la falta de conciencia sobre la seguridad vial contribuyen a esta conducta peligrosa.

Estas imprudencias al volante han provocado múltiples tragedias en las carreteras y calles del país, con consecuencias fatales para muchos jóvenes que se dedican a esta labor. El exceso de velocidad combinado con la falta de protección adecuada hace que los motoristas sean extremadamente vulnerables ante cualquier incidente, aumentando la tasa de mortalidad y lesiones graves. Por ello, expertos y autoridades hacen un llamado constante a la responsabilidad y al cumplimiento de las leyes para evitar más pérdidas humanas en el sector.