El presidente de la Suprema Corte de Justicia, Mariano Germán, evitó emitir comentarios directos sobre las acusaciones realizadas por la suspendida jueza Awilda Reyes, limitándose a declarar que “todo será dilucidado en los tribunales”. Cuestionado sobre su posible inhibición en el juicio disciplinario contra Reyes, Germán no ofreció una respuesta concreta, reiterando que el proceso judicial seguirá su curso normal. “No voy a decir ni que retiro ni que mantengo, eso lo resolverán los tribunales”, insistió.

En medio del creciente escándalo por supuesta corrupción en el Poder Judicial, el cardenal Nicolás López Rodríguez calificó como “una vergüenza” la situación que involucra a varios jueces acusados de recibir sobornos a cambio de decisiones judiciales. López Rodríguez defendió públicamente al presidente de la Suprema Corte, destacando su historial de seriedad, pero exhortó a la jueza Awilda Reyes a presentar pruebas claras para sustentar sus acusaciones. “Aquí hay muchas cosas mal hechas en la justicia”, añadió el prelado.

Ambas figuras ofrecieron estas declaraciones durante el acto de lanzamiento de una campaña comunitaria a favor del sector Caliche en Villa Duarte, organizada por la Fundación Futuro Cierto. Aunque el evento no estaba vinculado al ámbito judicial, el tema de la crisis en la justicia dominicana dominó los titulares por la gravedad de las imputaciones y el silencio institucional que rodea el caso.