La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, afirmó este viernes que “cualquier intervención de Estados Unidos queda completamente descartada”, al referirse a las recientes declaraciones del secretario de Estado estadounidense, Marco Rubio, sobre la situación de seguridad en territorio mexicano. La mandataria reafirmó que existe un “entendimiento claro” con la administración estadounidense, pero sin comprometer la soberanía nacional.
Durante su conferencia matutina, Sheinbaum señaló que, aunque algunos sectores dentro del país continúan solicitando la intervención militar de Estados Unidos, dicha postura es “muy poco patriota y profundamente intervencionista”. Calificó estas demandas como intentos de promover “la injerencia del exterior” en asuntos que corresponden exclusivamente al Estado mexicano.
La jefa de Estado subrayó que, pese a las presiones externas, México y Estados Unidos mantienen una relación de colaboración en materia de seguridad basada en la cooperación y no en la subordinación.“Se garantiza la soberanía, la integridad de nuestro territorio y la cooperación sin imposiciones”, remarcó.
Las declaraciones surgen tras los comentarios de Rubio, previo a su participación en la cumbre de ministros de Relaciones Exteriores del G7 en Canadá, donde afirmó que en México existen regiones del país “gobernadas por carteles más poderosos que las fuerzas de seguridad locales e incluso nacionales”. Aunque descartó acciones unilaterales o una incursión militar sin solicitud formal del Gobierno mexicano, Rubio describió la situación como “una preocupación para todo el hemisferio”.
Sheinbaum, sin embargo, insistió en que la seguridad nacional es responsabilidad del Estado mexicano y que se continuará fortaleciendo la estrategia interna sin aceptar ningún tipo de intervención foránea.