Los abogados defensores de los principales acusados de dirigir la supuesta red de narcotráfico y lavado de activos conocida como “Operación Búfalo NK” han informado que los cabecillas presentan graves problemas de salud. Entre ellos se encuentran Rafael Inoa Santana y su socio Isidoro Rotestwart, quienes, según sus representantes legales, padecen diversas afecciones médicas que complican su situación judicial.

Isidoro Rotestwart, de 64 años, es descrito por su defensa como una persona con múltiples complicaciones de salud, entre ellas hipertensión, diabetes y problemas de movilidad. “Es una persona que cojea de una pierna, ha sufrido trombosis y tiene una condición en la sangre”, detallaron los abogados, quienes argumentan que su estado físico es más preocupante que las acusaciones en su contra. Asimismo, sostienen que Rotestwart es un comerciante con más de 20 años de experiencia en áreas como el transporte y la pesca, y que su actividad ha sido lícita.

El Ministerio Público, por su parte, insiste en que tiene pruebas contundentes contra los implicados, las cuales han sido recopiladas desde 2019. Estas pruebas incluyen una colaboración internacional, particularmente desde Colombia, que vincula a los acusados con la red de narcotráfico a nivel global.

La jueza Fátima Veloz, de la Oficina de Atención Permanente del Distrito Nacional, ha aplazado hasta el próximo viernes 27 la audiencia de medidas de coerción contra los 10 detenidos en el marco de la “Operación Búfalo NK”. Esta operación, llevada a cabo por aire, mar y tierra, busca desmantelar una de las mayores redes de tráfico de drogas y lavado de dinero en la región.

La defensa mantiene que sus clientes son comerciantes legítimos, mientras el Ministerio Público continúa con su proceso judicial, asegurando que las pruebas y testimonios serán suficientes para sostener las acusaciones.