En una jornada judicial que se extendió por cerca de siete horas, el Palacio de Justicia de Ciudad Nueva fue escenario de decisiones trascendentales en el caso conocido como “Operación Gaviota”. El tribunal, tras evaluar la solicitud del Ministerio Público, impuso medidas cautelares contra siete de los ocho imputados por su presunta participación en una estafa piramidal que alcanza los 3000 millones de pesos.
Rafael Martínez Batista, Rafael Martínez Colón, William Félix, Carlos Manuel Jiménez Junior y Ariel Espinosa deberán cumplir 18 meses de prisión preventiva en el Centro de Corrección y Rehabilitación (CCR1) de Najayo Hombres. En tanto, Eridania García Velo de Martínez y Joana del Cristo Amparo de Jiménez fueron enviadas al Centro de Corrección y Rehabilitación de Najayo Mujeres, mientras que Lucía Méndez Colón enfrentará una medida menos severa con una garantía económica de 1 millón de pesos a través de una empresa aseguradora, presentación periódica e impedimento de salida.
El caso, declarado complejo por la pluralidad de víctimas y la cuantía de los fondos involucrados, ha revelado una red de presuntas maniobras fraudulentas mediante las cuales se prometía a los inversionistas rendimientos mensuales entre el 10% y el 30% a través de actividades de trading.
Durante la audiencia, se escucharon testimonios desgarradores de algunas víctimas que relataron haber vendido propiedades y perdido grandes sumas de dinero debido a la supuesta red delictiva. “Yo reinvertí mi capital y ahora he perdido todo, incluyendo una casa que tenía. Esta empresa solo promete y no cumple”, lamentó uno de los afectados.
La jueza Fátima Velo, quien presidió la audiencia, pospuso la decisión sobre las 18 compañías mencionadas en el proceso, ya que no contaban con representación legal en el día de hoy. Además, fijó para el 12 de septiembre la revisión obligatoria de las medidas impuestas a los ocho acusados.